Buah!, ha sido increible, se vuelve a tropezar otra vez contra la misma piedra. A veces el fútbol es cruel e injusto, pero es que lo de hoy no ha sido un partido de fútbol, ha sido un partido de frontón. El gol de Ramires, y sobretodo el fallo del penalti los ha hundido. La ansiedad les ha podido, y, por qué no decirlo, a algunos jugadores se les ve algo justos. Algún tiro a media distancia podrían haber intentado, ha habido muchas oportunidades para hacerlo. Al final si que se ha hechado de menos a un jugador como Villa. Las bandas no han funcionado, los extremos no han tenido un gran día y no han desequilibrado nunca.
Termino, un insulto al fútbol, y aunque soy merengue, quería ver una final Real Madrid - Barça, ojalá nosotros mañana tengamos mas suerte.
Salu2!