Este problema debe resolverse de forma sencilla. Es probablemente un problema de los controladores, que se han hecho incompatible con esta nueva versión.
La primera solución que te recomendamos es que busques en el sitio web del fabricante del equipo una actualización para estos mismos controladores de la tarjeta gráfica.
Aprovecha y actualiza también los demás, quedando así tu ordenador actualizado.
Si este problema se mantiene, lo que puedes hacer es revertir la instalación de la actualización y así volver al punto anterior.
Para ello, debes tener acceso a la Configuración de Windows 10 y acceder a Actualizaciones y seguridad. Ahí dentro encuentras la pestaña Recuperación, donde debes tener la opción para volver a la versión anterior de Windows 10.
Después de esta recuperación, el problema debe resolverse.
La primera solución que te recomendamos es que busques en el sitio web del fabricante del equipo una actualización para estos mismos controladores de la tarjeta gráfica.
Aprovecha y actualiza también los demás, quedando así tu ordenador actualizado.
Si este problema se mantiene, lo que puedes hacer es revertir la instalación de la actualización y así volver al punto anterior.
Para ello, debes tener acceso a la Configuración de Windows 10 y acceder a Actualizaciones y seguridad. Ahí dentro encuentras la pestaña Recuperación, donde debes tener la opción para volver a la versión anterior de Windows 10.
Después de esta recuperación, el problema debe resolverse.